EL SINDICALISTA WALTER CORTÉS LE GANÓ LA INTENDENCIA DE BARILOCHE A LA GOBERNADORA ARABELA CARRERAS.

Con el 20% del 60% que concurrió a votar, Cortés se quedó con el sillón del Centro Cívico.

Con doce candidatos a intendente, donde Carreras competía por Juntos Somos Río Negro, se llevaron a cabo las elecciones de la ciudad más poblada de la provincia.
Cortés no aparecía como favorito y otros sectores apuntaban contra su pasado de la causa Arbos, catalogada como el emblema de la corrupción gremial patagónica.
La actual mandataria provincial era la que se visualizaba con más chances, sobre todo teniendo en cuenta que su gestión tuvo hasta el momento el epicentro en Bariloche y un gran número de funcionarios, entre ministros, secretarios y terceras líneas, son de la ciudad por la que Carreras buscaba el sillón municipal; sumado al despliegue de recursos del estado provincial puestos a disposición de la campaña sin ningún disimulo.

Un dato más que preocupante, fue el total de votos en blanco y nulos. Los votos en blanco ocuparon el tercer lugar con casi nueve mil sufragios.
Cortés fue cauto en su discurso como ganador y habló de un «triunfo humilde» atendiendo a qué deberá generar un gobierno de consensos, primero por la conformación del Concejo Deliberante donde no tendrá mayoría y, segundo porque seguramente entendió que la ciudadanía barilochense habló con el 40% que no concurrió a votar, los 9000 votos en blanco y los 4000 nulos.

Fotos: Gentileza Radio Seis