Jacobacci: Jornadas de supervisión de esquila en Río Negro

El Ministerio de Desarrollo Económico y Productivo, a través de Prolana Río Negro, está llevando a cabo una serie de jornadas de supervisión de máquinas de esquila en distintas localidades de la provincia. Actualmente, el equipo se encuentra en la localidad de Jacobacci, y luego continuará en Río Chico.

El objetivo principal de estas jornadas de supervisión es acompañar a los trabajadores para que puedan realizar sus tareas de manera eficiente y segura, asegurando el cumplimiento de los estándares de calidad y bienestar animal establecidos por Prolana.

Durante las mismas, se supervisa el proceso de esquila, haciendo hincapié en la correcta aplicación del sistema por parte de los esquiladores. Se evalúan aspectos como las posiciones de trabajo, los cortes realizados y el trato dado a los animales, con el objetivo de asegurar un manejo adecuado y respetuoso.

También se brinda acompañamiento a aquellos que están en proceso de aprendizaje, ofreciendo orientación y realizando las correcciones necesarias para que puedan desarrollar sus habilidades de manera efectiva y segura. Este apoyo es esencial para garantizar que la esquila se realice con el cuidado necesario, tanto para los animales como para la calidad de la lana.

Además de la supervisión del proceso de esquila, el equipo de Prolana también se encarga de verificar el acondicionamiento de la lana. Se revisa que el trabajo en la mesa de acondicionamiento, desde la disposición de los vellones hasta la limpieza, se realice de forma correcta y que cumpla con los estándares establecidos por Prolana. Asimismo, se controla la elaboración de los fardos de lana y la correcta documentación de los datos para la posterior venta.

En cada establecimiento, se verifica que no existan factores contaminantes, que haya una buena iluminación y que se mantenga la limpieza necesaria para un adecuado acondicionamiento de la lana. Todo el proceso se realiza en cumplimiento de los requisitos de Prolana, incluyendo la supervisión de todo el equipo de trabajo, desde el esquilador hasta el contratista.

Cabe destacar que esta medida previene la propagación de enfermedades que podrían afectar la salud de los animales y la calidad de la lana, y refuerza el compromiso con el bienestar animal. Además, asegura el cumplimiento de los estándares exigidos en cada etapa del proceso, garantizando así un trabajo de alta calidad.